Esperanza Iris fue una leyenda. Nacida en Villahermosa, Tabasco, en el año de 1882, desde niña conquistó los escenarios por su carisma y talento, y su gracia la llevó a cautivar audiencias en el mundo entero. Conocida como la Reina de la Opereta o la Emperatriz de la Gracia, viajaba a principios de siglo en barcos y trenes con una compañía de más de cien integrantes entre músicos, cantantes, bailarines y personal de tramoya, con baúles repletos de fastuosas escenografías y vestuarios, presentando hasta dos o tres operetas diarias. Era venerada por todos: reyes y altas personalidades de la cultura, aristócratas y gente del pueblo.
Tras una gira internacional de cinco años, en plena Revolución Mexicana, pudo conquistar su sueño: construir su teatro en la Ciudad de México con dinero propio, un centro de arte y cultura que inmortalizara su nombre. En 1918 se lo inauguró Venustiano Carranza y aún hoy, conocido hoy como Teatro de la Ciudad Esperanza Iris (en la calle de Donceles # 36) es un ícono de la capital.
Todo apuntaba a gloria, pero todo se vino abajo cuando su tercer marido, Francisco Sierra, 28 años menor que ella, tuvo la tembile ocurrencia de poner una bomba en un avión de Mexicana de Aviación. La historia supera cualquier ficción. El 24 de septiembre de 1952 la bomba explotó en el vuelo 525 con ruta Ciudad de México-Oaxaca. El piloto fue un héroe, controló la nave sin instrumentos y logró aterrizar la nave, con todo y el enorme boquete, en la base militar de Santa Lucía.
Nadie murió. La única víctima fue Esperanza Iris, quien por la defensa ciega de Sierra, su marido-hijo, lo perdió todo. De ser venerada y aplaudida, su vida se vio empañada por el escándalo. Pasó de la humillación y la lástima, hasta quedar sepultada en el olvido.
Silvia Cherem, periodista y escritora, Medalla Liderazgo Anáhuac, realizó una minuciosa investigación y todo en la novela Esperanza Iris: Traición a cielo abierto sucedió tiene sustento en la realidad.
La autora presentó su libro en la Universidad Anáhuac del Sur y en la Universidad Anáhuac del Norte los días 21 y 22 de agosto.
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