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Conocer la Ley de Migración evita malentendidos

La presentación ante las autoridades migratorias no debe entenderse como una detención migratoria

La migración irregular sigue siendo un fenómeno global complejo, y muchos migrantes en su paso por México temen enfrentar procesos administrativos que les afecte negativamente su futuro. Actualmente, la desinformación o la percepción errónea de los procedimientos migratorios mexicanos por los migrantes extranjeros aumenta su vulnerabilidad al crimen organizado; su irregularidad migratoria además les causa desconfianza hacia las soluciones previstas en nuestra ley. Para muchos migrantes, el sistema legal migratorio es opaco y confuso; sin embargo, su funcionamiento es necesario para hacer valer los derechos de los migrantes, dentro de la política migratoria nacional. 


El caso ejemplar, es la presentación del migrante irregular ante las autoridades migratorias para documentarle su situación de manera legítima en el país. A menudo, por temor y confusión, muchos migrantes evitan este proceso de presentación, llegan a pagar “mordidas”, se exponen a la trata de personas, y abandonan sus documentos de identidad. Sin embargo, este temor es mal fundado al ser confundido con la detención migratoria. Tal confusión reduce la colaboración con las autoridades migratorias nacionales. En este tenor, es fundamental diferenciar ambos procedimientos que tienen implicaciones legales y administrativas distintas. Además, que conlleva una protección humanitaria para el migrante. 
 

La presentación ante las autoridades migratorias es el acto por el cual un migrante comparece ante una oficina de migración para identificar su estancia de facto en el país y otorgarle una situación legal. Este procedimiento está regulado por la Ley de Migración y su Reglamento, así como por diversos tratados internacionales en materia de derechos humanos. 
 

Aunque dicho proceso puede derivarse de operativos migratorios, solicitudes de regularización e, incluso, denuncias anónimas, idealmente se produce cuando un migrante se presenta por voluntad propia a regularizar su estatus o solicitar protección ante las autoridades migratorias en el interior del país. Es importante destacar que la presentación ante las autoridades migratorias es una etapa administrativa que no implica en sí misma una sanción. Su propósito es verificar la presencia del migrante y, en su caso, ofrecerle alternativas de regularización. Sin embargo, la falta de difusión informativa clara en los procedimientos genera temor, ya que muchos lo asocian erróneamente con la privación de la libertad y su deportación inmediata. La presentación ante las autoridades debe entenderse entonces como un paso dentro del proceso migratorio y no como un castigo.
 

Aun cuando la detención migratoria puede resultar en la privación de la libertad, es importante destacar que la Ley de Migración establece que la detención es sólo una medida de última instancia garantizada en todo momento por el respeto a los derechos humanos. Existen medidas alternativas a la detención que permiten a los migrantes continuar con sus trámites en libertad. Estos se aplican especialmente en el caso de grupos vulnerables como menores de edad, mujeres embarazadas o solicitantes de asilo.
 

La detención migratoria ocurre solamente cuando un migrante es retenido en una estación migratoria por tiempo indefinido, con el objetivo de definir su situación ilegal dentro del país y procede la deportación. En México este mecanismo sólo se justifica en casos excepcionales, por ejemplo, cuando existe riesgo de fuga o cuando un migrante no puede acreditar su identidad. Siendo este segundo caso el más común. 
 

Uno de los principales desafíos para las autoridades migratorias es la falta de documentación por parte de los migrantes irregulares. Cuando un migrante no puede acreditar su identidad, tampoco puede definir su situación legal. En estos casos, las autoridades requieren tiempo adicional para verificar la identidad del migrante para después establecer su estatus. Aun en casos que no resulten en la detención por este motivo, la falta de documentación complica el acceso a servicios básicos y mecanismos para hacer valer derechos individuales, lo que prolonga la precariedad de los migrantes. Es conveniente que las políticas migratorias consideren mensajes que fomenten la portación y presentación de documentos de identidad de los migrantes irregulares, así como combatir su robo.
 

Es entendible que muchas personas que entran irregularmente al país desconozcan sus derechos y obligaciones. Las organizaciones de derechos humanos y las agencias gubernamentales deben trabajar en conjunto para proporcionar información accesible y clara a los migrantes sobre sus derechos y procedimientos migratorios en ambos lados de la frontera, sobre todo su presentación ante las autoridades migratorias. Esto puede incluir la distribución de folletos en distintos idiomas, la información en los albergues, en las comunidades fronterizas y la habilitación de líneas de asistencia legal para migrantes en tránsito.
 

Es fundamental difundir entre la población migrante la distinción legal entre presentación y detención migratoria, así como su impacto en la protección de sus derechos. El desconocimiento de estos conceptos puede dar lugar a sufrir abusos y a tomar decisiones erróneas por parte de los migrantes. La información clara y accesible es clave para garantizar que las leyes migratorias sean aplicadas de manera justa y humanitaria, para bien de los migrantes y del país.
 

 

Por el Mtro. José R. Xilotl Soberón, Docente de la Escuela de Relaciones Internacionales y alumna Silvia Carolina Madrigal, estudiantes de la licenciatura en Derecho.

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